sábado, 26 de noviembre de 2011

C.1 Parte 1


Capítulo 1. 

-¡Eh, preciosa!- Me dijo Leo tendiéndome una mano para que saliera del coche de mi hermano nada mas abrí la puerta del Volvo.
-Buenos días Leo...- Respondí bajando la mirada hacia los desgastados zapatos avergonzada, a la par que observaba de reojo a Damen poner los ojos en blanco y las manos sobre el volante.
-Bueno, preciosa- Dijo enfatizando la palabra con un toque de escepticismo.- Te vengo a buscar aquí mismo a las...
-Dos menos cuarto.- Respondí yo cortándole deseando que arrancara de nuevo el motor y saliera escopeteado hacia el trabajo junto con sus irónicos comentarios sobre mi nuevo novio.
Mi hermano dirigió una última mirada de advertencia a Leo y arrancó el coche desapareciendo trás la rotonda. Suspiré aliviada y dejé que Leo rodeara mis hombros con su brazo.
-¿Algún día le caeré bien a tu hermano? Preguntó un tanto preocupado.
-Claro que sí, solo está celoso.- Le dije echando una última ojeada hacia la carretera.- Piensa que me ha tenido toda para él durante 17 años. - Continué desviando la mirada hacia sus ojos negros con una sincera sonrisa en los labios.
Nos dirigimos a las puertas del instituto charlando animadamente, pero en mi interior mantenía la duda constante de confesarme realmente a Leo. Las palabras acusantes de Morfeo rondaban por mi mente desde la noche anterior cuando por fin le conté que había empezado a salir con Lionel Lerotti, me sorprendió escucharlo tan enfadado, le buscó mil y un defectos de las pocas cosas que me había dado tiempo a contarle poco antes de que su ira estallara de esa forma.
-¡No puedo creer que estés con ese Lerotti! Dijo acusante la voz, su tono generalmente melódico y agradable había desaparecido.
-¿Pero qué te pasa? ¡Siempre me has apoyado en mis elecciones! Repliqué indignada
-En esta no puedo. ¡Simplemente no puedo! No me lo creo, tú y ese chico...Es totalmente desagradable. Murmuró de forma arrogante.
-¿Desagradable?.- Se me escapó una carcajada gélida mientras un montón de sentimientos se apiñaban en mi pecho, deseosos de salir hacia fuera y estallar como una bomba de relojería.- ¿Precisamente tú me dices que imaginártelo es desagradable? ¡Que te traten de lunática es desagradable!- Grité al borde del llanto.- ¡Tener flashes extraños de imágenes en mitad de la calle y escuchar voces constantemente es desagradable!
-Iris...-Susurró Morfeo preocupado.-Yo nunca que querido que tu...que te hicieran algo así...
-¿Y qué pensabas que harían? ¿Que mis padres aceptaran que su hija estaba cuerda antes del accidente de mi madre?.- Exclamé realmente enfadada.-¿Que mi padre, ya fuera de sus caudales, comprendiera mi situación y me entendiera? ¿Que me ayudara mi hermano, demasiado ocupado en su testosterona adolescente, cuando a los 10 años tuve la mayor alucinación de mi vida, en público, y pasé el resto de primaria como "la loca de Iris"?.- Conforme despotricaba fui subiendo decibelios hasta terminar tosiendo de forma ruidosa por haber forzado la voz. Qué sueños más reales podía llegar a tener.
Morfeo había callado hacía tiempo, no sabía si había dejado de escucharme y hablaba sola o simplemente me estaba ignorado por pura conveniencia, tampoco sabía cuan egoísta podía llegar a ser mi "conciencia" en este sueño.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

En brazos de Morfeo/Maribel Martínez Serra